Si todavía estás dudando entre comprarte o no una moto, el siguiente análisis conseguirá que salgas de dudas.
A la hora de comprar una moto, los motivos principales dependen del tipo de motociclista que seas en ese momento. Está el apasionado, para el cual viajar y rutear sobre dos ruedas siempre ha sido su sueño: el práctico, que compra su moto para ir a trabajar; las prisas, cuyo motivo principal es olvidarse de los atascos; el racing, que lo que busca es la moto más deportiva; el clásico, que busca esa sensación de libertad que le ofrece su custom… Pero si eres de los que nunca ha tenido una moto y todavía estás dudando entre si comprarse una, hay distintos motivos que, a nivel objetivo, tienes que tener en cuenta.
Son más económicas que un auto pensar que por menos de una cuarta, quinta, o incluso, sexta parte de lo que cuesta un auto tienes un vehículo de dos ruedas con el que transportarte es un punto muy a favor de la moto. Por no hablar que, si la compras de segunda mano, puedes encontrar motos de cualquier cilindrada y en muy buen estado a precios de ganga. Pero no solo es importante el precio del vehículo en sí, sino que tanto el seguro, los impuestos y el mantenimiento de una moto es bastante más económico que el de un vehículo de cuatro ruedas. Y ya sabemos que, hoy en día, lo que opine el bolsillo cuenta y mucho, por lo que es un punto muy a favor para la moto.
¿Problemas de estacionamiento? Y aquí tenemos otro punto más que merecido para la moto con respecto al auto. Se terminó dar vueltas y vueltas por las manzanas colindantes a tu destino para buscar un espacio libre; ya nunca más tendrás que meterte en un parking desesperado porque no encuentras sitio y llegas tarde a cenar. Con la moto llegas y te estacionas allá donde vayas.
Sube el precio de la gasolina, pero no el consumo. Hoy en día encontramos motos cuyo consumo es menor y podemos realizar kilómetros y kilómetros por menos dinero. La tranquilidad que tienes al llenar el depósito y despreocuparte durante días no tiene precio y eso es un gran punto para la moto.
El tiempo es oro uno de los principales motivos por los que nos compramos una moto es poder llegar antes a cualquier lugar. La agilidad con la que llegamos a un semáforo facilitándonos salir los primeros recorta, poquito a poco, el tiempo de nuestros trayectos. Y es que un atasco a primera hora de la mañana puede amargarte el día, pero si vas en moto, esto no es un problema. Punto para la moto.
Lo importante no es el destino, sino el camino normalmente, cuando nos vamos de viaje en un vehículo con más de dos ruedas, estamos deseando llegar al destino para empezar a disfrutar. Si el viaje lo realizas en moto, el trayecto pasa de ser un medio a ser el fin en sí mismo. Esto es porque en moto disfrutas de cada curva, de cada parada, hasta de cada atasco. Es lo que hace que un viaje sea importante desde que sales de casa hasta que vuelves.
Es un medio de transporte anti-contagios en los tiempos que corren hoy en día esto es un punto muy a favor para las dos ruedas. La moto se ha convertido en uno de los medios de transporte más seguros a nivel pandémico-sanitario, un medio de transporte individual en el cual mantienes la distancia de seguridad, más que de sobra, con el resto del mundo. Y como toda medida de seguridad que podamos mantener ante esta situación es poca, aquí va otro punto para la moto.
Felicidad absoluta sí, porque, aunque no te gusten las motos y la compres por todos los motivos descritos un poco más arriba, en cuanto sientes en tu propia piel la indescriptible sensación de ir en moto, te conviertes, instantáneamente, en una persona feliz. Esto es algo que solo los que vivimos sobre dos ruedas podemos llegar a entender y es que, aunque pasemos frío, calor y luchemos contra el viento o la lluvia, cuando llegamos a nuestro destino, por muy cansados que estemos, la sonrisa que tenemos en nuestra cara no nos la quita nadie y eso, amigos lectores, vale todos los puntos del mundo.