Sabemos lo beneficioso que es entrar en circuito, pues este no es un mundo reservado, sino para todo aquel motociclista que quiera mejorar sus habilidades de cara a una conducción segura, porque conocer que tus límites y los de tu moto están mucho más lejos de lo que realmente crees es positivo de cara a la carretera.
Ahora bien, no todo el mundo ha entrado en circuito y para todos hay, hubo o habrá una primera vez, así que vamos a repasar un poco los cimientos de un motociclista que llega a rodar por primera vez en un circuito.
1. Usar la equipación apropiada la equipación para rodar en circuito debe estar compuesta por un mono de piel con protecciones (al menos en hombros, codos y rodillas), botas altas, casco integral, guantes largos de piel y una buena espaldera es lo mínimo que debemos ponernos para entrar en circuito.
Aparte podemos añadir un sotomono técnico para mejorar la comodidad térmica y la operación de entrar y salir del mono, y por supuesto que todas las prendas deben ser homologadas para el uso al que van a ser destinadas. Al fin y al cabo, se trata de nuestra integridad física y con eso no se juega.
2. Preparar la moto para la incursión en circuito una pequeña caja de herramientas con lo necesario para hacer frente a los imprevistos es altamente recomendable. Una modesta multiherramienta, unas cuantas Allen, cinta americana, bridas y un alicate nos salvarán de muchos imprevistos.
3. Neumáticos en buen estado para alguien que se apunta por primera vez a una competencia en circuito es lógico pensar que lo va a hacer con sus neumáticos de calle habituales, pero sí hay algunas consideraciones a tener en cuenta.
La presión de los neumáticos en circuito debe bajarse hasta el rango recomendado por el fabricante (y acordarse de volver a subir las presiones antes de salir a carretera). También deberemos fijarnos en que el neumático tiene que estar dentro de los márgenes de desgaste, con un desgaste regular y con la fecha de fabricación sin caducar.
4. ¿Slicks sí o no? Esta es la discusión eterna y la respuesta no es tan sencilla como podría parecer. Sobre el papel lo suyo es utilizar en circuito neumáticos de circuito, es decir, slicks sin dibujo no homologados para la calle, pero para un primerizo no es ni mucho menos la mejor opción.
5. Tener la mentalidad idónea en primer lugar, alguien que entra por primera vez en pista debe tomarse las cosas con calma y aprenderse el circuito. Una vez con la pista asimilada es hora de empezar a pensar en ir cada vez un poco más rápido, pero sin saltarse pasos intermedios. No es cuestión de ir rápido por ir rápido, hay que centrarse en cómo sentimos la moto y los neumáticos a medida que aceleramos el paso. Ir cada vez más rápido sale de manera natural si no forzamos, así que hay que evitar ser ansiosos y armarnos de paciencia.
6. Huye de los malos consejeros desconocemos el motivo, pero por algún extraño proceso mental el ser humano tiende a sentir la necesidad de dar lecciones al resto de seres humanos, aunque esté equivocado. En circuito donde la testosterona y la adrenalina se disparan a partes iguales es bastante común ver masterclasses particulares de participantes que enseñan a otros las claves para ir rápido, tocar rodilla o ser más aerodinámicos.
7. Comer e hidratarse apropiadamente parece una obviedad, pero no lo es. Comer e hidratarse como se debe durante un día de circuito es muy, muy importante. Olvídate de las comilonas y los atracones con los amigos, pues están totalmente desaconsejados.
Frutos secos, barritas energéticas, algo de pasta y fruta serán lo más apropiado a la hora de enfrentarse a un día en circuito. La ingesta es mejor repartirla a lo largo de todo el día para tener una actividad metabólica constante y un aporte de nutrientes homogéneo a lo largo de todo el día.