RODADA DOBLE PROPÓSITO SUZUKI GUATEMALA

El pasado sábado 28 de octubre, la emoción y la adrenalina se apoderaron del Centro Comercial Flores del Lago en una reunión de motociclistas apasionados por las legendarias motos Suzuki. Este evento marcó el inicio de una emocionante travesía: la Rodada Doble Propósito hacia el majestuoso Volcán de Pacaya.

Desde tempranas horas de la mañana, los rugidos de los motores Suzuki resonaron en los alrededores del centro comercial. A partir de las 7 de la mañana, los pilotos comenzaron a llegar, listos para compartir su pasión por las motocicletas y forjar nuevos lazos de amistad. En total, se reunieron alrededor de 30 intrépidos motociclistas, todos ellos dispuestos a embarcarse en una emocionante aventura. La atmósfera estaba llena de emoción, ya que los participantes se tomaron el tiempo para conversar y conocerse mejor.

A las 8 de la mañana, los encargados del evento tomaron la palabra para dar la bienvenida a todos los participantes y proporcionar detalles sobre la ruta y las recomendaciones para el viaje. La seguridad y el disfrute de la experiencia eran las principales preocupaciones de los organizadores, y se aseguraron de que todos estuvieran bien informados antes de partir.

Uno de los momentos más conmovedores del día fue la oración que se llevó a cabo. El personal de Suzuki se unió a los pilotos en una oración, ofreciendo palabras de protección y gratitud antes de emprender esta emocionante travesía. Fue un recordatorio de que la pasión por las motos se combina con un profundo respeto por la vida y la aventura.

Como parte de la preparación, a los participantes se les proporcionó una bolsa de suministros esenciales para el viaje. En su interior, encontraron agua pura, frutas y otros aperitivos que serían sus aliados en la ruta hacia las faldas del majestuoso Volcán de Pacaya.

Finalmente, llegó el momento más esperado: la salida de los pilotos para la emocionante aventura que les aguardaba. La ruta, que tomaría aproximadamente 4 horas, prometía paisajes impresionantes, desafíos en el camino y la emoción de conquistar el volcán.

A medida que los motores rugieron y las ruedas se pusieron en movimiento, los participantes se embarcaron en una jornada que seguramente sería inolvidable. La Rodada Doble Propósito hacia el Volcán de Pacaya prometía no solo la emoción de la conducción, sino también la belleza natural de Guatemala en su máxima expresión.